Uno de los destinos más encantadores y turísticos de Holanda Septentrional es el Zaanse Schans. Este pintoresco conjunto de edificios y molinos históricos a orillas del río Zaan, a solo unos kilómetros de Ámsterdam, es ideal para hacer una excursión en la que podrás adentrarte en la historia de la región y descubrir cómo era la vida en los Países Bajos en los siglos pasados.
El pueblo de los molinos de Holanda
Zaanse Schans es conocido popularmente como «el pueblo de los molinos de Holanda», y con razón. Aquí podrás admirar numerosos molinos que aún hoy siguen en funcionamiento, un testimonio vivo de la importancia que tuvo la producción industrial en la región de Zaanstreek.
Por su valor histórico y la belleza de su entorno, Zaanse Schans se ha convertido en una visita imprescindible para quienes viajan a los Países Bajos.
Vídeo de Zaanse Schans
¿Estás pensando en hacer una visita a Zaanse Schans y quieres saber más sobre este lugar? Entonces no te pierdas el vídeo que grabé en Zaanse Schans. En este vídeo nos damos un paseo por Zaanse Schans y os muestro cómo llegar, qué ver y qué hacer en Zaanse Schans.
Qué ver y qué hacer en Zaanse Schans
Zaanse Schans es un encantador pueblo-museo que recrea la vida cotidiana de los holandeses en los siglos XVIII y XIX, con sus icónicas casas de madera, molinos de viento, un astillero y hasta una antigua granja lechera. Durante tu visita, podrás disfrutar de actividades únicas, como degustar quesos tradicionales, hacer un paseo en barco y presenciar en directo cómo se fabrican los famosos zuecos de madera holandeses.
Este conjunto de casas y molinos fue cuidadosamente trasladado aquí a partir de 1959, como parte de un proyecto para preservar el patrimonio arquitectónico de la región del Zaanstreek. Hoy en día, Zaanse Schans es uno de los principales destinos turísticos de los Países Bajos, ofreciendo una inmersión en la historia y la cultura del país.
Mi consejo: Completa tu visita a Zaanse Schans con un paseo por el centro de Zaandam, donde podrás admirar sus famosos edificios que parecen estar hechos con bloques de Lego. Así podrás combinar la historia tradicional holandesa con la arquitectura moderna en una experiencia inolvidable. ¡Una combinación perfecta para un día completo!
Museo gratuito al aire libre
El conjunto de Zaanse Schans es un buen ejemplo de cómo era la vida en un pueblo del Zaanstreek alrededor del 1850. Las casas y molinos del Zaanstreek se caracterizaban entre otras cosas por ser de madera y estar pintadas de color verde.
En Zaanse Schans se ven ejemplos de casas de comerciantes y notables, normalmente situadas al lado de un dique y de tamaño más grande que las casas de los trabajadores. Los trabajadores vivían en los talleres y molinos, que se situaban a lo largo de las zanjas perpendiculares al río, de las cuales se abastecían de agua para trabajar.
El lugar donde se emplaza Zaanse Schans no podía ser además de mayor belleza: con vistas al río Zaan y rodeado de campos de pastos, diques y canales con puentes de madera. Un lugar que invita a pasear o bien ir en bici.
La visita al conjunto del Zaanse Schans es totalmente gratuita y es por eso que con los años se ha convertido en un gran reclamo turístico, ofreciendo una de las imágenes más típicas de Holanda a sus visitantes.
Molinos en el Zaanse Schans
Zaanse Schans cuenta con más de diez molinos originales con los que todavía hoy se trabaja para hacer desde aceite o moler especias hasta para cortar madera o fabricar tintes. La estampa de estos molinos a lo largo de la orilla del río Zaan es una de las más conocidas y fotografiadas de los Países Bajos.
Durante una visita al Zaanse Schans es posible visitar los molinos por dentro de forma gratuita y descubrir cómo se trabajaba en ellos. Ten en cuenta que el espacio dentro de los molinos es reducido y que a veces se pueden generar colas para entrar, especialmente si se hace alguna demostración.
Zaanse Schans también cuenta con un museo sobre la historia de los molinos del Zaanstreek, el Molenmuseum De Zaansche Molen, que recoge todo tipo de molinos en miniatura e incluye la obra de arte «Molenpanorama».
De hecho es justamente gracias a estos molinos que el Zaanstreek se consolidó como una de las primeras zonas industriales de Europa.
Fábrica de zuecos
Caminando por Zaanse Schans te encontrarás con varios puestos de artesanía. Uno de los más interesantes es el de la fábrica de zuecos, donde hay una pequeña exposición sobre la historia de los zuecos de madera holandeses y se hacen demostraciones en vivo.
En la tienda de la fábrica de zuecos puedes además admirar todo tipo de zuecos de madera. ¡Los hay de todos los tamaños y colores! La tienda cuenta además con un sinfín de souvenirs típicos de Holanda.
Fábrica de quesos
Otra de las paradas indispensables en Zaanse Schans es la de la fábrica de quesos Kaasmakerij Catharina Hoeve. Dentro de una antigua granja, los fabricantes de queso, vestidos con los trajes regionales, hacen demostraciones diarias en las que explican el proceso de producción del queso holandés y los diferentes tipos de queso.
En la tienda de la granja se venden centenares de tipos diferentes de queso, ideales para comprar como souvenir, y es posible hacer degustaciones.
Otros trabajos de artesanía representados en el Zaanse Schans son la fundición de estaño, la producción de velas para barcos y molinos, licor, chocolate, jabón o tinajas.
Panadería y tiendas antiguas
Una de las casas más fascinantes en Zaanse Schans es la panadería In de Gecroonde Duyvekater, que ahora hace la función de tienda, cafetería y museo. En ella se producen todo tipo de galletas y panes, entre los que destaca el Zaanse duivekater, un pan típico de la zona. Su interior te teletransporta a otras épocas y en la tienda encontrarás todo lo necesario para hacer galletas típicas holandesas además de golosinas.
Los amantes de las antiguallas no deben tampoco perderse la vecina tienda de Jagershuis Trash & Treasures, donde se encuentran todo tipo de productos vintage de decoración y cerámica de Delft.
Primer Albert Heijn
Un lugar curioso para visitar, sobretodo si vives en Holanda y frecuentas los supermercados del Albert Heijn, es la tienda original de Albert Heijn de 1887, que se conserva intacta en Zaanse Schans. Aquí descubrirás entre otras cosas que Albert Heijn se inició en el mundo del comercio al por menor con la venta de café en su pequeña tienda de comestibles de Oostzaan hace ya muchos años.
En la antigua tienda de comestibles de Albert Heijn se muestra el interior original y los productos que se vendían antiguamente. Una manera divertida de descubrir cómo ha cambiado la forma de hacer la compra desde entonces.
Crucero en barco
Una de las actividades más recomendadas durante una visita a Zaanse Schans, es la de subirse a uno de los barcos de Windmill Cruises, que hacen una ruta turística por la zona. De este modo podrás disfrutar de unas vistas todavía más extraordinarias de Zaanse Schans y sus molinos desde el agua.
Los barcos zarpan cada media hora desde el muelle en Kalverringdijk y hacen un recorrido de 25 minutos por las aguas del río Zaan. El paseo en barco incluye además una audioguía en español a bordo.
También son varias las empresas que ofrecen paseos en barco para grupos y en privado.
Zaans Museum
Para los que la visita a Zaanse Schans les sepa a más, pueden comprar tickets para el museo de la región, el Zaans Museum, que queda al lado de Zaanse Schans. Este museo reúne una colección interesante de artefactos, fotografías y más objetos con los que se explica la historia de la región del Zaanstreek.
Una parte muy interesante del museo es la dedicada a la fábrica de chocolate y galletas Verkade. En la Verkade Experience puedes ver cómo funcionaba una fábrica a principios del siglo XX y descubres la historia de esta mítica marca, conocida entre otras cosas por las chicas que trabajaban en la fábrica.
Otros museos interesantes que puedes visitar en Zaanse Schans son el museo del tiempo Museum Zaanse Tijd, que muestra la historia del reloj holandés, y el Molenmuseum, que explica la historia del Zaanstreek y sus molinos (fecha de apertura prevista mediados 2020).
Todos estos museos cobran entrada, por lo que si vas a visitar varios quizás te puede interesar comprar la tarjeta descuento Zaanse Schans Card.
Historia del Zaanse Schans
Aunque parece que las casas y molinos del Zaanse Schans hayan estado aquí toda la vida, estas provienen en realidad de otros lugares de la región y fueron trasladadas aquí a partir de 1959 bajo las direcciones del arquitecto Jaap Schipper.
La idea de los fundadores, la fundación Zaans Schoon, era la de preservar los edificios históricos de la zona del Zaanstreek que estaban en proceso de desaparición.
El resultado fue la reproducción de un poblado de alrededor de 1850, en donde habitaban tanto comerciantes y notables como trabajadores. Las casas, originales y antiguas, son de madera de color verde, que era la arquitectura típica de la zona.
Hoy en día, las casas siguen siendo habitadas o bien transformadas en tiendas y restaurantes.
El Zaans Museum, el museo de la zona del Zaanstreek, abrió sus puertas en 1999 y cuenta desde 2008 con el pavellón Verkade, dedicado a la antigua fábrica de chocolate y galletas Verkade.
Desde 1574 que en Zaanse Schans se celebra el PinksterZaan, un evento en el cual se rememora la victoria de los locales ante la armada española durante la Guerra de los Ochenta Años. El evento tiene lugar durante el Pinksterweekend, el fin de semana de la Segunda Pascua (en mayo o junio).
Información práctica
Si tienes en mente visitar Zaanse Schans, aquí te doy algunos consejos prácticos para planificar tu viaje. Te explicaré la mejor forma de llegar a Zaanse Schans, si necesitas comprar entradas para sus museos y molinos, y te daré recomendaciones sobre dónde alojarte o comer en los alrededores.
Cómo llegar a Zaanse Schans
Zaanse Schans se encuentra a orillas del río Zaan, en una zona conocida como el Zaanstreek, a pocos kilómetros al norte de Ámsterdam.
El Zaanse Schans queda cerca de la ciudad de Zaandam y Ámsterdam y se puede visitar tanto en coche como en transporte público. También son muchas las empresas que ofrecen tours guiados desde Ámsterdam.
En coche
El aparcamiento principal de Zaanse Schans se encuentra al lado del museo Zaans y cuesta 12€. Aquí hay espacio para todo tipo de vehículos, incluso caravanas, aunque en verano estas son desviadas al aparcamiento de detrás de la estación Zaandijk-Zaanse Schans (Wezelstraat 12).
En transporte público
Se puede viajar a Zaanse Schans desde Ámsterdam en autobús. La línea de autobús 391 te lleva por ejemplo en 40 minutos directamente desde la estación central de Ámsterdam hasta Zaanse Schans.
Si coges el tren deberás viajar primero desde la estación central de Ámsterdam a la estación Zaandijk-Zaanse Schans, un trayecto que dura 17 minutos. A continuación deberás caminar unos 15 minutos hasta llegar a Zaanse Schans.
En una excursión en autobús
También son muchas las empresas que ofrecen excursiones en autobús guiadas desde Ámsterdam. Esta es sin duda la mejor opción si quieres evitar viajar en transporte público.
En ferry
Sin duda la forma más espectacular de llegar a Zaanse Schans desde Ámsterdam es a bordo del Zaanferry. Se trata de un ferry que zarpa desde la estación de Ámsterdam y te lleva hasta Wormerveer parando por el camino en Zaanse Schans además de otros lugares de interés. La parada del Zaanferry en Zaanse Schans se encuentra en el Zuiddijk. El billete es de ida y vuelta.
Entradas Zaanse Schans
Para entrar a Zaanse Schans no es necesario comprar entradas, ya que se trata de un pueblo al aire libre. Ahora bien, algunos de sus molinos funcionan como museo y si que requieren pago previo. Y si lo que quieres es hacer una excursión guiada a Zaanse Schans, entonces también necesitarás reservar de antemano.
Dónde comer en Zaanse Schans
Son varias las opciones que tienes para comer en Zaanse Schans. Desde un puesto con pescado frito hasta una panadería donde venden todo tipo de dulces típicos de Holanda. Obviamente también puedes degustar y comprar quesos en la granja de queso de Zaanse Schans o bien comer algo en la cafetería del Zaans Museum o el restaurante De Hoop op d’Swarte Walvis con vistas al río.
Dónde dormir en Zaanse Schans
Quien lo desee puede prolongar su estancia en Zaanse Schans alojándose por ejemplo en el hotel Heerlijck Slaapen op de Zaanse Schans o bien en las cercanas poblaciones de Zaandijk, Koog aan de Zaan y Zaandam.
Fotos de Zaanse Schans
Mapa de Zaanse Schans
Preguntas frecuentes sobre Zaanse Schans
A pesar de ser un lugar muy turístico, en mi opinión la visita al pueblo de Zaanse Schans si que merece la pena. Además de ser un lugar de lo más bonito y pintoresco, la visita a Zaanse Schans te brinda la oportunidad de conocer mejor la historia y cultura del país, de ver todo tipo de molinos de cerca y disfrutar de la campiña holandesa.
Zaanse Schans es un destino que se puede disfrutar en cualquier época del año, pero la mejor temporada para visitarlo es entre primavera y principios de otoño. Durante los meses de abril a septiembre, el clima es más agradable y los molinos de viento están en pleno funcionamiento.
Si prefieres evitar las multitudes, lo ideal es visitarlo entre semana o en los meses de otoño, cuando el ambiente es más tranquilo y acogedor. En invierno, a pesar del frío, es cuando Zaanse Schans está más tranquilo.
Zaanse Schans es tan grande y tiene tanto que ofrecer que lo mejor es ir a pasar el día entero. De este modo podrás hacer una visita a sus molinos, ver las demostraciones de artesanía con tranquilidad, pasar por el museo Zaans y disfrutar de un paseo en barco de forma relajada.
La forma más sencilla para ir de Ámsterdam a Zaanse Schans es en tren. El trayecto desde la estación central de Ámsterdam a la estación Zaandijk-Zaanse Schans dura unos 17 minutos y una vez allí tendrás que caminar unos 15 minutos hasta llegar a Zaanse Schans. Otra opción para ir más rápidos es la de hacer una excursión en autobús desde Ámsterdam.
No, el pueblo de Zaanse Schans es totalmente gratuito, pero para algunas atracciones es necesario pagar entrada. Para ahorrar en las entradas puedes comprarte la tarjeta de descuento Zaanse Schans Card.
Zaanse Schans está en general bien adaptado para los visitantes minusválidos, con una ruta a pie sin obstáculos y baños y plazas de aparcamiento para discapacitados. También se puede reservar una silla de ruedas en el museo Zaans. Es importante remarcar que no todas las casas y/o molinos de Zaanse Schans son accesibles para la gente en silla de ruedas o cochecitos de bebé. De todos los molinos, sólo se puede acceder al molino de Jonge Schaap con silla de ruedas.
Zaanse Schans está abierto a diario al público entre 9:00 y 17:00 h. Como no todas las atracciones cumplen con este horario o no siempre están abiertas, se recomienda primero consultar con la web oficial de Zaanse Schans.
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