La provincia de Frisia, en holandés Friesland, es un lugar muy distinto al resto de los Países Bajos. Para empezar, esta es la única provincia en Holanda con una segunda lengua oficial, el Fries o frisio. Frisia es además una provincia eminentemente rural y costera, donde proliferan las granjas de vacas y ovejas, los pueblos construidos en colinas, los canales y una naturaleza casi salvaje. Aquí uno puede disfrutar de la naturaleza y de muchísimas actividades al aire libre sin aglomeraciones y lejos del bullicio de la ciudad.
Una provincia independiente
Ya en época romana vivían en la costa del Mar del Norte los frisones, una población de origen germana que supo mantenerse independiente durante muchos años. De ahí que en Frisia en la actualidad todavía se hable el idioma frisio, tengan tradiciones y vestimentas propias, y luzcan con orgullo su bandera de rayas azules y blancas y corazones rojos.
Los hay que incluso van un paso más allá y les gustaría ver a Frisia (o Fryslân, como ellos la llaman) de nuevo independiente.
Mi consejo: Si quieres integrarte bien durante u estancia en Frisia, aprende alguna palabra en su idioma. Por ejemplo, para decir «hola qué tal» se dice «hoi, hoe giet it?», «goeie» es para dar los buenos días y «oan’t sjen» para despedirse.
Dónde está Frisia y cómo llegar
Frisia se sitúa al noroeste de Holanda a orillas del Mar del Norte y haciendo frontera con las provincias de Groninga y Drenthe hacia el este, Overijssel y Flevolanda al sur y Holanda Septentrional al este.
Su capital es Leeuwaarden, aunque lo que aquí más predomina en realidad son las aldeas y los campos de pasto, además de pantanos, canales, diques, y como no, la costa del Mar del Norte.
Para llegar a Frisia tanto se puede ir en coche como en tren. El acceso a las Islas Frisias se hace a bordo de los ferrys que parten desde los puertos de Harlingen, Holwerd y Lauwersoog.
Qué ver y qué hacer en Frisia
A la provincia de Frisia se la conoce sobretodo por las once ciudades históricas por las que pasa la maratón del Elfstedentocht, las marismas del Waddenzee y las Islas Frisias. Pero la región tiene muchos otros atractivos, como su singular cultura y naturaleza, o el amplio abanico de actividades deportivas que se pueden hacer al aire libre.
Los pueblos y ciudades de Frisia
Frisia es una provincia de pequeños pueblos, granjas y agua por todas partes. Mientras que la ciudad de Leeuwaarden se alza como capital cultural de la provincia, las otras diez poblaciones por las que pasa la famosa carrera del Elfstedentocht, son asimismo muy interesantes y bonitas de ver.
Destacan en especial la ciudad monumental de Harlingen, el antiguo pueblo pesquero de Stavoren, el pintoresco pueblo de Hindeloopen, los canales de Heerenveen (por donde antaño se transportaba la turba) y Sneek, la capital de los deportes acuáticos de Frisia.
La provincia tiene además cuatro islas (Vlieland, Terschelling, Ameland y Schiermonnikoog) a las que se puede llegar en barco y donde uno puede disfrutar de la naturaleza y la tranquilidad y la belleza de sus pueblos.
Un detalle curioso de Frisia es que sus ciudades y pueblos tienen otro nombre en el idioma frisio. Por ejemplo, a Leeuwarden se la conoce como Ljouwert, a Sneek como Snits y Hindeloopen es Hylpen. Muchos de los pueblos han sido además construidos encima de colinas artificiales, o como ellos las llaman terpen.
Mi consejo: Hindeloopen es un pintoresco pueblo frisón, sin coches y con calles estrechas y puentes de madera sobre los canales. Es un buen punto de partida para conocer otros lugares de la zona como Makkum, Sneek, IJlst y Sloten y hacer un mini viaje por carretera en el suroeste de Frisia.
La naturaleza en Frisia
La naturaleza en Frisia destaca por su esencia casi salvaje, la omnipresencia del agua y sus vastos campos. Únicos en su clase son las zonas pantanosas de Oude Venen y el Nationaal Park de Alde Feanen, las marismas del Waddenzee y los coloridos brezales y los campos de dunas de Appelscha.
El Mar de Wadden o Waddenzee, que queda entre medio de tierra firme y las Islas Frisias, se trata del humedal continuo más grande del mundo y está catalogado como Patrimonio Mundial por la Unesco debido a la diversidad y riqueza de su ecosistema.
Especial mención merece la zona natural del suroeste de Frisia, el Nationaal Landschap Zuidwest Fryslân. En ningún otro lugar de Holanda encontrarás una variedad paisajística tan grande como aquí. Desde bosques y acantilados, montículos y extensas tierras de cultivo, hasta molinos, lagos y canales, cinco de los pintorescos pueblos del Elfstedentocht y la encantadora zona de colinas boscosas de Gaasterland. Un lugar paradisíaco que se puede disfrutar tanto en bicicleta como en barco o a pie.
Al suroeste de la provincia queda el lago del IJsselmeer, uno de los lugares favoritos para los amantes de la vela y los deportes acuáticos.
Los campos de turba
Al igual que en su vecina Drente, en Frisia la extracción de la turba fue también muy importante en el pasado, cosa que en la actualidad ha dejado como resultado campos de turberas convertidos en bosques pantanosos, tierras de juncos y aguas abiertas como las del Friese Veen, Fochteloërveen y los lagos de Frieze Meren.
No te pierdas por ejemplo el Nationaal Park De Alde Feanen, un hermoso parque nacional con lagos y canales por los que navegar que tiene sus orígenes en los campos de turba, y el museo al aire libre de It Damshûs en Nij Beets, que da una idea de cómo trabajaban y vivían los trabajadores de la turba y cómo se fabricaba la turba.
Las granjas de Frisia
Como región eminentemente rural que es, el paisaje de Frisia está además salpicado de granjas. Algunas de ellas, como las granjas de kop-hals-rompboerderij, son muy peculiares ya que solo se dan en las provincias de Frisia y Groninga. En este caso la casa donde vive la familia del granjero (llamada kop) está interconectada con el granero (romp) por la zona de trabajo (hals).
Este tipo de granjas se hicieron populares en el pasado porque permitían al granjero guardar más grano. El triángulo del techo servía además como entrada para los búhos que se usaban para disuadir a los ratones.
Las granjas tipo stelp son otro modelo típico de granjas en Frisia. Eran más baratas que las kop-hals-rompboerderij ya que toda la granja se situaba bajo un mismo techo. Este se inspiraba en las granjas tipo stolp de Holanda Septentrional, pero sin tener el techo de forma piramidal, ya que la base era rectangular para así tener más espacio en el interior para los establos y almacenar el heno.
Visitar alguna de estas granjas es hoy en día posible, ya que muchas de ellas están abiertas al público o bien tienen tiendas donde venden sus propios productos al consumidor. No te pierdas por ejemplo la granja de biológica de Boer Bart en Rotstergaast, donde podrás ver las típicas vacas frisias. Esta granja dispone además de una zona de juegos espectacular para niños y una cafetería donde tomar algo.
Pueblos en terpen
Debido a su prolongada convivencia con las marismas y las frecuentes inundaciones, los frisones se adaptaron construyendo montículos donde residir, enfrentándose así a las inclemencias del tiempo. Por eso, muchos pueblos de Frisia se asientan en colinas o terpen, como los llaman ellos.
Allingawier es un excelente ejemplo de un pueblo en un terp.
Islas Frisias Occidentales
Las Islas Frisias, catalogadas como uno de los últimos lugares vírgenes de Europa son un lugar ideal para practicar deporte, caminar por las marismas (wadlopen) o incluso avistar focas.
Menos la isla de Texel, el resto de las Islas Frisias Occidentales pertenecen a la provincia de Frisia. En holandés se conoce a este conjunto de islas como las Waddeneilanden. Un lugar paradisiaco, muy rico en plantas, animales (como las focas y las ovejas) y aves autóctonas, que viven entre los fuertes vientos del Mar del Norte y las aguas dulces y saladas.
La carrera del Elfstedentocht
El Elfstedentocht es una maratón de más de 200 km en patines de hielo que se hace por los canales y vías fluviales de alrededor de once ciudades frisias: Leeuwarden, Sneek, IJlst, Sloten, Stavoren, Hindeloopen, Workum, Bolsward, Harlingen, Franeker y Dokkum.
Se trata de uno de los eventos más importantes y representativos de la provincia, pero que sólo tiene lugar en los inviernos más severos, ya que el hielo es natural y ha de ser lo suficientemente grueso en todos los puntos de la carrera.
La primera cursa del Elfstedentocht se celebró en 1909 y se ha repetido desde entonces hasta 15 veces. La última carrera se produjo el 4 de enero de 1997. Ya que cada vez cuesta más que se celebre de nuevo un Elfstedentocht, en 2018 se instalaron 11 fuentes decorativas hechas por diferentes artistas en las 11 ciudades del Elfstedentocht. De este modo los visitantes pueden continuar haciendo el recorrido por las once ciudades del Elfstedentocht aunque no hiele.
De hecho la pasión por el patinaje sobre hielo en Frisia es tal que la provincia cuenta con un museo dedicado al patinaje, el Eerste Friese Schaatsmuseum en Hindeloopen, y dos hermosas pistas de hielo artificial, el Elfstedenhal en Leeuwarden y el conocido Thialf en Heerenveen.
Thialf es un estadio con pista de hielo fabuloso y la joya de Frisia. Aquí entrenan patinadores profesionales y se celebran campeonatos mundiales y otros eventos deportivos sobre hielo de forma regular.
El dique de Afsluitdijk
El dique de Afsluitdijk, de 32 km de longitud, es una de las obras hidráulicas más grandes de los Países Bajos. Se construyó entre 1927 y 1933 para así proteger a las poblaciones alrededor del Zuiderzee de futuras inundaciones. El dique convirtió el mar de Zuiderzee en el lago IJsselmeer, que pasó a ser de agua dulce.
En la actualidad el dique se puede atravesar tanto en coche como en bicicleta y es todo un espectáculo que atrae a cientos de visitantes. El centro informativo Afsluitdijk Wadden Center es una visita obligada para todo aquél que quiera saber más sobre el Mar de Wadden.
Tampoco te pierdas el Afsluitdijk de noche, ya que gracias a la obra futurística de Daan Roosegaarde llamada «Gates of Light», las esclusas del dique son iluminadas de forma automática al pasar el coche. ¡Todo un espectáculo!
Las momias de Frisia
En la recóndita población de Wiuwert se encuentra uno de los misterios más grandes y sorprendentes de Holanda. Allí yacen varios cadáveres momificados de forma natural, cuatro de los cuales se pueden ver en la cripta funeraria.
Este lugar está lleno de enigmas, ya que no se sabe con certeza quiénes son estas momias ni cómo estos cuerpos nunca se descompusieron. Probablemente se trate de restos de miembros de la familia Walta y/o de algunos labadistas.
Aquí también yace el cuerpo de Anna Maria van Schurman, una niña prodigio y la primera estudiante de los Países Bajos admitida en la universidad (en este caso, la de Utrecht) en 1636.
Otros lugares de interés
- Fries Museum (Leeuwarden): el Museo Frisón de Leeuwarden está dedicado a la cultura e historia de los frisios.
- Scheepstimmerwerf De Hoop (Workum): muelle centenario donde se puede ver como era la construcción de los barcos en la antigüedad.
- Fries Scheepvaart Museum (Sneek): museo sobre la historia naval de Frisia desde el siglo XVII hasta el siglo XX.
- Museum Dr8888 (Drachten): museo de arte vanguardista con una importante colección de obras de los movimientos artísticos De Stijl y Dadaísmo.
- Friese Meren: los lagos del el suroeste de Frisia, que están conectados los unos con los otros por ríos y canales, son el paraíso para los amantes de los deportes acuáticos. En este lugar se encuentra además el mayor número de empresas de alquiler de barcos de los Países Bajos.
- Koninklijke Eise Eisinga Planetarium (Franeker): el planetario más antiguo del mundo data de 1781 y todavía hoy está en funcionamiento. Desde el año 2023 forma parte de la lista de Patrimonio Mundial de la UNESCO.
- Woudagemaal (Lemmer): estación de bombeo a vapor más grande del mundo que todavía hoy está en funcionamiento.
- IJlst: uno de los once pueblos del Elfstedentocht y una joya desconocida al suroeste de Frisia, repleta de canales y molinos históricos.
- Sloten: Sloten está conocido como el pueblo más pequeño de Frisia. Un lugar idílico repleto de canales y edificios históricos.
- Makkum: este pueblo costero está conocido por su playa, que incluye un bulevar por donde pasearse, restaurantes, parques infantiles, tiendas de surf y mucho más.
- De Kruidhof hortus van Fryslân (Buitenpost): jardín botánico donde puedes comprar plantas y hierbas, tomarte algo y visitar un museo sobre la era glacial.
- Karma Deleg Chö Phel Ling (Hantum): un lugar muy espiritual (y curioso de ver) es el templo budista tibetano a las afueras del pueblo de Hantum, en medio de la campiña de Frisia.
- AquaZoo (Leeuwarden): zoológico donde podrás admirar sobre todo muchos animales que viven en el agua, como osos polares, nutrias, pingüinos, focas y cocodrilos. Un zoo divertido para todas las edades. Compra aquí tus entradas.
Productos típicos de Frisia
Gracias al aislamiento con el que los habitantes de Frisia vivieron durante décadas, en estas tierras floreció una cultura y lengua propia además de razas de animales hoy en día muy valoradas, como lo son las vacas, caballos y ovejas frisias.
Los frisios se distinguen también por sus deportes, que incluyen el patinaje sobre hielo, las regatas de skûtsjes, el fierljeppen o salto con pértiga y el juego de balonmano keatsen.
En Frisia verás granjas del tipo kopp-hals-romp y stelp, pueblos instalados encima de colinas artificiales, campanarios de iglesias con cubiertas a dos aguas, embarcaciones llamadas skûtsjes, y por supuesto, la bandera frisia ondeando orgullosa en todas partes.
Esta también es una de las pocas provincias en las que probablemente podrás ver a gente que todavía usa zuecos de madera.
Personajes conocidos como la modelo Doutzen Kroes o el patinador Sven Kramer son de Frisia. Aunque quizás la más conocida a nivel mudial es Mata Hari. Margaretha Geertruida Zelle, alias Mata Hari, creció en la casa de Grote Kerkstraat 212 de Leeuwarden y ganó fama mundial por su trabajo como espía. Su historia es explicada en el Fries Museum.
La marca de ropa C&A tiene asimismo sus orígenes en Frisia. Esta fue fundada por los hermanos Clemens y August Brenninkmeijer, originarios de Westfalia, quienes abrieron su primera tienda de prêt-à-porter en Sneek en 1841.
La provincia de Frisia también está conocida por sus panes, el Fries roggebrood (pan de centeno frisio) y el Fries suikerbrood (pan de azúcar frisio), quesos como el Friese nagelkaas (queso de clavos), galletas como la kruidkoek, oranjekoek y las Fryske dúmkes, además de los embutidos, la mostaza, el licor y la cerveza local.
Información práctica
Cuándo visitar Frisia
Frisia es un lugar perfecto para visitar durante todo el año: en invierno para patinar sobre hielo por sus canales, en primavera y otoño para disfrutar de sus bosques y en verano para navegar en sus lagos y disfrutar de unas vacaciones relajadas en las Islas Frisias.
Eventos como los campeonatos de fierljeppen (salto con pértiga) en julio y las regatas de skûtsjesilen en agosto, o el mercado de flores de Leeuwarden, el Bloemetjesmarkt, que se celebra en el día de la Ascensión, atraen siempre a mucho público.
Dónde comer en Frisia
Como zona eminentemente agrícola y pesquera, puedes estar seguro de que en Frisia comerás estupendamente. Junto con los deliciosos productos regionales, como el pan de azúcar y las galletas frisonas, Frisia es una provincia que sorprende a nivel culinario.
- Stek Leeuwarden (Harlingersingel 2, 8913 CJ Leeuwarden): bonito restaurante al lado del canal y con vistas a la histórica torre de Oldehove de Leeuwarden.
- KB Food & Drinks (Keppelstraat 4, 9101 MV Dokkum): moderno restaurante en el pueblo de Dokkum. No te pierdas su delicioso high tea.
- Picknickers (Ûtbuorren 54, 8493 MA Terherne): fabuloso restaurante sin pretensiones en medio de la naturaleza. Ideal para hacer una parada mientras que uno hace una excursión en los alrededores del lago Sneekermeer.
Dónde dormir en Frisia
Las once ciudades por las que pasa el Elfstedentocht son un destino vacacional muy popular entre los holandeses incluso cuando no hay ninguna carrera sobre patines de hielo. Aquí es donde se encuentran la mayoría de alojamientos turísticos. Otros lugares muy recomendables para hospedarse durante una visita a Frisia es en la zona natural del suroeste de Frisia y por supuesto, en las Islas Frisias. Muchos de los parques de vacaciones de Frisia están además a pie del agua y uno puede incluso amarrar su propio barco delante del bungaló o cabaña en la que se hospeda.
- It Dreamland: glamping con casitas ecológicas de lujo en plena naturaleza y cerca del parque nacional Lauwersmeer. Muy bien adaptado para familias con niños.
- Inn Friesland: acogedor bed & breakfast a orillas del Waddenzee y muy cerca del pueblo de Holwerd, donde se puede coger el ferry hacia la isla frisia de Ameland o hacer caminatas por las marismas.
- ljeppershiem Vakantiepark: parque vacacional con tiny houses, cabañas de madera ecológicas y de diseño, al lado del agua.
- Himelsk: alojamiento en una pequeña iglesia reconvertida en casa con jardín y terraza. Ideal para visitar lugares como Hindeloopen y Stavoren y recorrer los lagos y la zona natural del suroeste de Frisia.
Busca aquí más hoteles en la región.
Frisia con niños
Para las familias amantes de la naturaleza y las actividades deportivas, Frisia es un paraíso. Aquí los niños tanto pueden ir en bicicleta como hacer vela o patinar sobre hielo.
Son muchas las excursiones y actividades al aire libre que se ofrecen para las familias en Frisia, desde el alquiler de barcos y canoas, hasta el avistamiento de focas o caminatas por las marismas del Mar de Wadden (recomendado a partir de 8 años).
También hay parques de atracciones como Sybrandy’s Speelpark y Duinen Zathe, parques de aventuras muy divertidos como Kameleondorp y Aventoer, piscinas al aire libre y parques acuáticos como Zwembad Mounewetter o granjas educativas como la Kinderboerderij de Naturij y Kinderboerderij Doniastate.
No te pierdas tampoco los bosques como Het Hossebos, Sparjebird y el Drents-Friese Wold, que cuentan con diversas rutas para niños como los caminos sensoriales (blotevoetenpad) y los caminos de gnomos (kabouterpad) y otras actividades y juegos infantiles.
Otro lugar recomendado es el Doolhofpark en Bospaviljoen Bakkeveen, un restaurante ubicado en el bosque que cuenta con un gran parque infantil además de varios laberintos donde los pequeños pueden jugar libremente mientras los papás se toman algo.
Y para los amantes de los animales, está el el AquaZoo, el zoológico de Leeuwaarden, o el parque temático de Speelparadijs Sanjesfertier, donde los niños también podrán ver animales además de pasárselo en grande en las atracciones del parque.
En caso de lluvia, nada mejor que ir a jugar al Speelbos Joure o al Indoorspeelparadijs Landal Esonstad, o darse un chapuzón en el paraíso subtropical de Swimfun.
Si lo que quieres es darle un toque cultural a vuestra visita no te pierdas el pintoresco pueblo de Hindeloopen, el Museo Frisón y el Museo de las Ciencias Naturales de Frisia, ambos en Leeuwarden, y el Museo Frisón Marítimo de Sneek.
Igual de curiosos son el pueblo museo de Aldfaers Erf (Het Friese Museumdorp) y el museo de la brujas de Appelscha (Heksenmuseum de Heksehoeve).
Y si a tu niño le encanta los trenes, que sepas que también hay un museo del transporte público en Ouwsterhaule, con modelos de trenes y autobuses antiguos.
De todas las Islas Frisias, Terschelling y Ameland destacan sobretodo como destinos familiares y ofrecen un gran abanico de actividades para hacer con los niños.
Y ya por terminar, come unas ricas pannenkoeken (tortitas holandesas) en el restaurante De Pannekoektrein de Marrum. Los famosos restaurantes de panqueques holandeses son siempre un éxito entre los niños, pero este de Marrum se sitúa en un tren histórico, lo que lo hace todavía más especial.
Lee más: