Esta provincia al noreste de los Países Bajos es uno de los mejores destinos para los amantes de la naturaleza. Con sus campos de turba, bosques, lagos y pequeñas aldeas, Drente (o Drenthe en holandés) se caracteriza por ser una provincia eminentemente rural y tranquila, donde uno puede relajarse y conectar con la naturaleza. Drente destaca asimismo por su colección de monumentos funerarios prehistóricos.
Las raíces de Holanda
Drente está conocida por ser la zona más antigua de Holanda. Por aquí se pasearon animales primigenios como tigres de dientes de sable, rinocerontes, ciervos e incluso ¡mamuts! Sus habitantes prehistóricos dejaron incluso grandes monumentos funerarios, los hunebedden, que todavía hoy se conservan en diferentes puntos de la provincia.
Como curiosidad, que sepas que la vida antaño en la provincia de Drente era muy dura. Sus habitantes, que vivían de la agricultura, del cuidado de los animales y de la extracción de la turba, fueron siempre de los más pobres del país. Con los años, Drente se ha ido modernizando y en la actualidad es uno de los destinos turísticos más auténticos del país.
Dónde está Drente y cómo llegar
Drenthe se sitúa en la parte noreste del país haciendo frontera con Alemania por una parte, y con las provincias de Groninga, Frisia y Overijssel por otra.
Assen y Emmen son sus principales ciudades, aunque lo que más predomina aquí son los pueblos, bosques y vastos prados. De hecho esta es una de las provincias con menos habitantes por metro cuadrado del país.
Tanto el tren como la autovía A28 cruzan la provincia de norte a sur y pasan por sus principales poblaciones, aunque de cara a visitar el resto de la zona lo mejor es hacer uso del coche, ya que los servicios de autobuses son limitados.
Qué ver y qué hacer en Drente
Drente es, a pesar de su aspecto rural y tranquilo, un lugar sorprendente. No sólo por su naturaleza, sino también por su rica historia. Aquí tanto puedes pasear entre megalitos de la época del neolítico, como visitar antiguas aldeas rurales o ver los restos de un campo de concentración de la Segunda Guerra Mundial.
Los pueblos y ciudades de Drente
Drente es una de las zonas más rurales y tranquilas de Holanda en la que las grandes ciudades escasean. Los que visitan Drente vienen atraídos sobretodo por su naturaleza y tranquilidad.
Assen, conocida mundialmente por su circuito de motos, es la capital de Drente, aunque la ciudad más grande de la provincia es Emmen.
Cabe destacar que durante la historia las únicas ciudades de Drente que recibieron derechos de ciudad fueron Coevorden (en 1408), Meppel (en 1644 y 1809) y Assen (en 1809). De hecho, la fortificada Coevorden fue una de las ciudades más importantes, ya que era el lugar de residencia del Drost van Drenthe, el regidor de las tierras, y fue por mucho tiempo la única conexión con el norte.
Otros pueblos conocidos de Drente son la aldea-museo de Orvelte, la capital de la región de los megalitos Borger, el histórico pueblo esdorp Norg y la bonita población de Zuidlaren, donde cada año se celebra el mercado de caballos más grande de Europa, el Zuidlaardermarkt.
La naturaleza en Drente
Drente es una provincia muy verde que ofrece tanto tranquilidad como aventura. Los bosques y campos de Drenthe son los lugares perfectos para disfrutar de la naturaleza, hacer senderismo, ir en bicicleta o incluso montar a caballo y descubrir la variada fauna y flora del lugar, con sus páramos, campos de brezales y turba.
No te pierdas sobretodo los humedales del parque nacional de Dwingelderveld, el area de brezales húmedos más grande de Europa Occidental, los bosques del Drents-Friese Wold o los campos alrededor del abrevadero del Drentsche Aa y los monumentos funerarios del Evertsbos y De Hondsrug.
También son muchos los lagos en la provincia de Drente que han sido convertidos en playas y lugares de recreación para las familias, como ‘t Nije Hemelriek, Ieberenplas y Blauwe Meer.
Los amantes del senderismo tienen muchas rutas entre las que escoger en Drente. Dos de las más importantes son el Pieterpad y el Drenthepad, que pasan por bellos parajes naturales, tumbas megalíticas, granjas sajonas, antiguas iglesias y molinos y pueblos tan pintorescos como Erm, Sleen y Noord-Sleen.
Por otra parte, los amantes de los caballos tienen una parada obligada en Hippisch Centrum Exloo donde cada miércoles y domingo se hacen carreras de hípica.
Mi consejo: Visita las fincas en los alrededores de Paterswolde —Landgoed De Braak, Landgoed Vennebroek y Landgoed De Duinen—. Estas áreas naturales ofrecen senderos bien señalizados que te llevarán a descubrir rincones escondidos como estanques, praderas y encantadoras granjas, además de un laberinto, el Doolhof Landgoed De Braak.
La ruta de los megalitos
Drente rebosa de fósiles y restos del pasado. Con un paisaje fruto de la última glaciación, existen huellas tanto de mamuts como de los primeros humanos que habitaron Holanda.
Lo más destacable sin duda son los dólmenes y monolitos de la zona de Borger, que cuenta con un museo propio, el Hunebedcentrum o centro nacional de información sobre megalitos, en el que se explica cómo era la vida aquí durante la prehistoria y en el que se puede ver el monumento megalítico más grande del país.
Los megalitos eran piedras de gran tamaño que se erigían como monumentos funerarios en la época del neolítico. En holandés se conocen con el nombre de hunebedden y en la actualidad se conservan un total de 88 megalitos, 82 de ellos en Drente.
Existen incluso varias rutas de megalitos que se pueden hacer: la Elfhunebeddentocht, de 14 kilómetros a pie partiendo desde el mismo Hunebedcentrum, y la Hunebed Highway, que va de Zuidlaren a Coevorden y se realiza en coche.
Más restos prehistóricos los encontrarás en lugares como los alrededores de Emmen, Eext, Bronneger, Valthe, Havelte y Midlaren, y en el museo OERmuseum de Diever. Descubre aquí una lista detallada de monumentos megalíticos prehistóricos en Drenthe.
Mi consejo: No te pierdas la ruta del mamut (Mammoetpad), un paseo a pie o en bicicleta de 800 metros entre Buinerbrug y el Hunebedcentrum en el que se cuentan diferentes historias sobre esta zona en tiempos prehistóricos y ¡en el que encontrarás reproducciones de mamuts a escala real!
Aldeas y campos de turba
Además de su riqueza natural, Drenthe destaca por sus antiguos asentamientos agrícolas y sus extensas turberas, las veengebieden.
Los esdorp eran aldeas que estaban compuestas por diferentes granjas. Algunos de ellos contaban además con un brink, un espacio verde en el centro del pueblo donde se guardaban los animales antes de que salieran a pastar al campo. En este caso al pueblo se le conoce como un brinkdorp. Lugares como Dwingeloo, Roden, Diever, Havelte, Vledder y Ruinen todavía conservan sus antiguas granjas con techo de paja y las estructuras de esdorp y brinkdorp.
Otra categoría de pueblos en Drenthe es la de los zanddorpen o aldeas que se construían en montículos de arena, como Aalden, Valthe, Anderen, Oosterhesselen y Dalen, donde todavía hoy se pueden ver antiguas granjas sajonas y molinos.
Para experimentar cómo era la extracción de la turba y la vida en uno de los pueblos antiguos de Drenthe, no hay nada mejor que hacer una visita al Openluchtmuseum Veenpark, el museo más grande de los Países Bajos.
Pueblo museo de Orvelte
Orvelte es un pueblo con carácter museístico en Drente, de ahí su nombre oficial: Monumentendorp Orvelte. En Orvelte uno se puede pasear entre antiguas granjas y descubrir cómo era la vida en esta región en el pasado.
El conjunto monumental es como un gran museo al aire libre donde descubrir antiguos oficios, ver un aprisco de ovejas e incluso subirse a un auténtico tranvía tirado por caballos.
Orvelte cuenta además de todo tipo de restaurantes, tiendas de productos regionales, galerías de arte y una agenda variada de eventos como las demostraciones regulares de fabricación de zuecos, hilos, telas y velas entre otros.
Muy divertido para los niños es el camino de Houten pad van Theodoor, una ruta con todo tipo de actividades para los niños en la naturaleza que pasa por el pueblo de Orvelte.
Campo de tránsito Westerbork
Westerbork fue un campo de tránsito en funcionamiento entre 1942 y 1945 desde donde se deportaron a miles de judíos, gitanos y miembros de la resistencia durante la Segunda Guerra Mundial. Entre ellos, la conocida niña judía Ana Frank y su familia.
En el lugar donde estuvo situado el Kamp Westerbork encontramos ahora un museo en el que se recuerdan tales hechos. También se pueden hacer tours guiados por los terrenos del antiguo Kamp Westerbork y ver diferentes monumentos para la memoria, los restos de las cabañas de los deportados y las vías del tren del campo de tránsito Westerbork.
La historia de Kamp Westerbork es sobretodo conocida por su papel en la deportación de judíos y gitanos a campos de exterminio nazis entre los años 1942 y 1945. Sin embargo, el complejo se construyó originalmente como campo de refugiados ya en 1939 y se mantuvo en uso hasta su demolición en 1971.
Colonias de la benevolencia
Al igual que la vecina provincia de Overijssel, Drente tiene un pasado «colonial». Veenhuizen, Frederiksoord y Wilhelminaoord formaron parte de la Maatschappij van Weldadigheid, unas colonias de benevolencia fundadas a principios del siglo XIX por el general Johannes van den Bosch. Su idea era la de proporcionar trabajo, refugio y educación a los más pobres, en su mayoría vagabundos, huérfanos y mendigos, para así reintegrarlos en la sociedad.
Las colonias funcionaron hasta la década de 1930 y en la actualidad son pueblos que se pueden visitar y cuentan con diferentes museos y edificios históricos. Una forma agradable de ver estas antiguas colonias es haciendo la ruta a pie o en bicicleta llamada Pauperpad. Otra opción es la de visitar el Gevangenismuseum, el Museo de la Prisión en la antigua colonia de Veenhuizen, donde hay una exposición que habla sobre este pasado colonial.
Mi consejo: Descubre más sobre el pasado y la historia de los que vivían en las colonias de la benevolencia con el libro «Het Pauperparadijs» de la escritora Suzanna Jansen.
Otros lugares de interés
- Zuidlaardermeer: Zuidlaardermeer es un hermoso lago donde practicar todo tipo de deportes acuáticos, pasear o darse un chapuzón en el agua. Cuenta con varios restaurantes, cámpings y parques vacacionales.
- Asserbos (Assen): el Asserbos, en el lado sur de la ciudad de Assen, es un bosque caducifolio muy antiguo con una superficie de unas 114 hectáreas. Este fue plantado bajo las órdenes de Lodewijk Napoleon Bonaparte, a quien le gustaba pasar aquí sus vacaciones.
- Drents Museum (Assen): el museo de Drente cuenta con una colección de arte, objetos y restos arqueológicos muy interesante, que incluye entre otras cosas, ¡la casa de muñecas antigua más grande del país y el barco más antiguo del mundo!
- Museo de la Prisión (Veenhuizen): antigua prisión de Veenhuizen en la que además de la historia del derecho penal en los Países Bajos, también se cuenta la historia de Veenhuizen, que en su época fue la colonia de benevolencia más grande de Holanda.
- Castillo de Coevorden (Coevorden): Kasteel Coevorden es el único castillo en Drente, que en la actualidad funciona como hotel y restaurante.
- Radiotelescopio de Dwingeloo: la oscuridad del parque de Dwingelderveld es ideal para los estudios de astronomía que se llevan a cabo desde el radiotelescopio de Dwingeloo y el centro de radioastronomía ASTRON. El enorme radiotelescopio de Dwingeloo es además un monumento nacional.
- Casa de Van Gogh (Veenoord): en la Van Gogh Huis uno se teletransporta a la casa en la que el gran pintor Van Gogh se alojó durante sus estancia en Drenthe.
- Meppel: Meppel es una de las joyas de Drenthe. La antigua ciudad comercial no es muy grande, pero tiene muchas atracciones como el centro histórico de la ciudad y sus canales, la torre de agua, y los molinos de viento De Weert y De Vlijt.
- Diever: en este pueblo se organizan desde 1946 obras de teatro de Shakespeare.
- Wildlands (Emmen): parque temático y zoológico. La atracción más popular para las familias en Drenthe. ¡Compra aquí tus entradas!
Productos típicos de Drente
Además de un dialecto (el Drents) y cultura propia, con sus tradiciones populares como el lanzamiento de bloques (blokgooien) y las típicas aldeas y granjas sajonas, Drente cuenta con una larga lista de productos regionales que incluyen panes, zumos, quesos, embutidos, galletas y mostaza entre otros.
No te pierdas por ejemplo el Drentse turf (bizcocho de especias relleno de nueces, pasas y hierbas) y las Drentse kniepertjes (galletas de mantequilla) y Drentse turfjes (galletas de mazapán cubiertas de chocolate).
Los caballos son otro elemento importante de Drente. Sin ir más lejos, en Zuidlaren tiene cada año lugar una de las ferias de caballo más grandes de Europa, la Zuidlaardermarkt.
Información práctica
Cuándo visitar Drente
Drente es el destino perfecto para unas vacaciones de desconexión y descanso en medio de la serenidad de sus aldeas y bosques. Tanto en invierno como en verano o primavera, siempre hay algo para hacer en Drente. Sin embargo, quizá el mejor momento para visitarlo sea en otoño, cuando sus bosques y praderas se cubren de tonos marrones y ocres, invitando a largos paseos en plena naturaleza.
Eventos que siempre atraen a mucho visitantes y curiosos a Drente son las hogueras de pascua, las explosiones de carbono para celebrar el año nuevo, las carrera de motos de Assen y el mercado de caballos de Zuidlaren.
Dónde comer en Drente
Drente cuenta con una gran cantidad de restaurantes y cafeterías en las que hacer una pausa y disfrutar de una buena comida. Algunas de mis recomendaciones son:
- Restaurant-Theater De Deel (Menso Altingstraat 6, 7841 CB Sleen): un restaurante donde cenar o tomarse algo mientras que se disfruta de una obra de teatro.
- Natuurplaats Noordsche Veld (Donderseweg 22, 9331 TB Norg): café situado en medio de la naturaleza y conocido sobretodo por su «Drenttea», un hightea con todo tipo de productos regionales tanto dulces como salados.
- Restaurant Sukade (Stoombootkade 10, 7941 BS Meppel): moderno restaurante situado en los canales de Meppel.
Dónde dormir en Drente
En Drente uno se puede alojar tanto en pueblos tranquilos como en medio de la naturaleza. La provincia cuenta con todo tipo de campings y parques vacacionales, además de modernos hoteles, románticos b&b y económicos hostales. Aunque lo más recomendable para sentirse como un local es alojarse en una de las granjas reconvertidas en alojamientos turísticos.
Algunas de mis recomendaciones:
- Hoeve de Eshof: antigua granja tradicional sajona de 1762 en el típico esdorp Norg ahora transformada en diversos apartamentos con piscina.
- LUDIEK eten en slapen: hotel de diseño con habitaciones acogedoras. Muy bien situado, a poca distancia de varios parques nacionales y lugares de interés como Meppel y Frederiksoord.
- Resort Hof van Saksen: resort vacacional cerca de la ciudad de Assen con diferentes casitas ideales para familias. Entre las instalaciones destacan su piscina y playa con parque infantil y la piscina de bolas.
- Landal De Bloemert: este camping resort ubicado cerca del bonito pueblo de Zuidlaren y con vistas al lago cuenta con bungalós completamente equipados, un parque infantil y todo tipo de comodidades para sus huéspedes.
- Center Parcs De Huttenheugte: situado en el entorno natural de Dalen, este parque vacacional alberga una granja infantil y el paraíso acuático Aqua Mundo. ¡Ideal para los que viajen con niños!
Busca aquí más hoteles en la región.
Mi consejo: Alójate en el acogedor B&B Puur Drenthe y disfruta de unas vacaciones rurales en Drente. Este alojamiento es ideal para familias que viajan con niños gracias a sus habitaciones familiares, parque infantil, granja de animales y jardín con barbacoa. Además, los huéspedes pueden relajarse al final del día en la sauna disponible. Comprueba aquí ladisponibilidad y precios.
Drente con niños
Especialmente para los que viajen con niños, Drente es un destino de vacaciones muy agradable. Es un lugar tranquilo en el que uno está muy en contacto con la naturaleza y en el que se pueden hacer muchas actividades, tanto deportivas como culturales.
El Wildlands Adventure Zoo de Emmen es sin duda uno de los lugares más populares para ir con niños en Drente. Este zoo reproduce varios ecosistemas y te lleva a explorar desde la sabana africana hasta el ártico. ¡Una auténtica aventura tanto para pequeños como adultos!
Parques de atracciones como Plopsa Indoor Coevorden, Drouwenerzand, Kabouterland y De Sprookjeshof, o los parques de aventura Klimavontuur Meppel y Molecaten Outdoor Drenthe, son asimismo una buena opción para pasar un día divertido en familia.
En Drente encontrarás además varios museos interesantes y aptos para el público infantil, como lo son el Hunebeddencentrum, dedicado a descubrir los misterios de la prehistoria, el museo de la prisión Gevangenismuseum en Veenhuizen, y el museo al aire libre Openluchtmuseum Veenpark, que cuenta la historia de la región de una forma muy visual y divertida.
Como provincia en la que abundan los bosques, no es de extrañar que exista un gran número de actividades y rutas familiares en la naturaleza. Un buen ejemplo es el bosque Boomkroonpad en Drouwen, que ofrece paseos por plataformas elevadas entre las copas de los árboles y diferentes rutas para hacer a pie, además de un camino de gnomos (kabouterpad) y un bosque con juegos, el Lorkenspeelbos. Otro bosque interesante es el Drents-Friese Wold, que cuenta con un kabouterpad (camino de gnomos) y un vlotevoetenpad (camino sensorial) para niños.
Muy divertidos también son los parques naturales con juegos para niños como el Beleefpark Dwingeloo y el Belevingsbos Kerkenveld.
Y si a tus niños les encantan los animales, no dejes de pasarte por la granja de De Drentse Koe en Ruinerwold, donde se podrán sentir como unos auténticos granjeros además de poder comer helados y jugar a sus anchas. Otra opción es hacer una visita a los apriscos de ovejas (schaapskooi) de por ejemplo Weiteveen, Exloo y Dwingelderveld.
En verano el lago ‘T Nije Hemelriek y la playa de Ermerstrand son algunos de los lugares favoritos entre los locales para darse un chapuzón.
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